El 4 de octubre marcó un punto de inflexión en la defensa del desarrollo industrial y energético de Extremadura. Ese día, en Navalmoral de la Mata, se presentó la Alianza por Almaraz, un movimiento cívico, empresarial e institucional que reúne a más de 80 entidades unidas por un objetivo común: garantizar la continuidad de la Central Nuclear de Almaraz, la primera industria de la región y uno de los pilares económicos de su entorno.
Impulsada por la plataforma ‘Sí a Almaraz, Sí al Futuro’, la iniciativa agrupa a ayuntamientos, asociaciones empresariales, sindicatos, universidades, colegios profesionales y organizaciones sociales. Todos ellos comparten una convicción firme: el cierre de la Central supondría un golpe irreparable para el tejido productivo extremeño y un freno al desarrollo económico de una comunidad autónoma que ha contribuido durante décadas al suministro eléctrico nacional.
La jornada del 4 de octubre contó con la participación de la presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola; el presidente de la Diputación de Cáceres, Miguel Ángel Morales; alcaldes de distintos signos políticos y representantes de la sociedad civil.
Durante el acto fundacional, los representantes de la Alianza firmaron un manifiesto en el que se insta a las administraciones públicas y a las empresas propietarias de la instalación a abrir un proceso de diálogo que permita mantener su actividad más allá del calendario previsto. El texto subraya la necesidad de preservar el empleo, la inversión y la estabilidad de un territorio que ve en Almaraz una pieza esencial de su futuro. Con esta unión sin precedentes, Extremadura ha querido enviar un mensaje claro y sereno: la defensa de Almaraz es también la defensa del progreso, del talento y de la energía que impulsa la vida de toda una región. La Alianza por Almaraz se erige, así, como un símbolo de compromiso colectivo y una expresión de confianza en un modelo de desarrollo equilibrado, sostenible y con visión de futuro.




