La Central Nuclear de Almaraz notificó el 16 de julio al Consejo de Seguridad Nuclear, siguiendo los procedimientos establecidos, que las válvulas de seguridad del sistema de extracción del calor residual (RHR) de la Unidad II estuvieron inoperables al confirmarse que en los equipos que determinan la presión de ajuste de las válvulas se emplearon manómetros que no cumplen los requisitos exigidos por el código ASME. La función de seguridad de estas válvulas, de protección contra sobrepresiones en frio en recargas, ha estado garantizada en todo momento.
Como consecuencia de este suceso se va a revisar el procedimiento de prueba correspondiente y adquirir nuevos instrumentos para que la medida de la presión sea acorde con lo requerido por el código ASME.
Este hecho no tuvo impacto en la seguridad de las personas, ni en la instalación, ni en el medio ambiente.